sábado, 26 de abril de 2008

FESTIVAL INTERNACIONAL DE CINE DEL SAHARA

A lo largo de la semana pasada y principios de ésta ha tenido lugar el Festival de Cine Internacional del Sahara (FISáhara), que se ha celebrado en Dajla, a cuatro horas de travesía por el desierto desde Tinduf.
Dirigido por Javier Corcuera, han acudido actores y actrices como Javier Bardem, Carmelo Gómez, Carlos Bardem, Javier Gutiérrez, Rosa María Sardá o Guillermo Toledo, junto a cantantes como Manu Chao, o directores y productores como Fernando Colomo.
Rosa María Sardá ha leído un comunicado por el que reivindica, en nombre de todos los presentes y ausentes que lo apoyan, que se reconozca la existencia del pueblo saharaui, situado al suroeste del Sahara, que lleva más de 33 años olvidado y se mantiene por tanto en condiciones de marginación y exclusión social, donde apenas existen fuentes de energía y los alimentos escasean.
Javier Bardem ha declarado: “Hay que dar a conocer lo que parece la trastienda del mundo, la existencia de los que parecen invisibles… Los saharauis son los protagonistas aquí, no yo… ”
Acto seguido ha leído un escrito instando al gobierno español para que asuma su responsabilidad por la independencia del Sáhara, al que se han sumado los demás actores, como Guillermo Toledo, recalcando que éste “debe presionar al pueblo marroquí para que se cumplan las resoluciones de la ONU sobre el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui”.
Los actores han convivido durante una semana en jaimas con los saharauis, compartiendo el ezlam o turbante negro que les caracteriza, los rituales del té y la nostalgia por la recuperación del estatus que les fuera arrebatado.
El núcleo central de las proyecciones radica en el género documental, aunque se han podido ver igualmente películas como 13 Rosas de Emilio Martínez Lázaro o Mataharis, de Icíar Bollaín, directores que apoyan la causa del Sahara y el reconocimiento de los derechos fundamentales de los saharauis.
Tiba Sibi, responsable del Polisario para el FISahara reconoce que: “El festival nace con la intención de que se conozcan otras culturas, aunque en próximas ediciones el objetivo es que puedan proyectarse también películas realizadas por saharauis”.
Por este motivo se ha establecido un acuerdo con la escuela de San Antonio de los Baños en Cuba, donde acudirá un grupo de saharauis becado para que puedan aprender las técnicas de realización. Ya que la idea de implantar una escuela de cine resulta inviable por la escasez de medios, se compensa con talleres de montaje, de cámara y fotografía que los profesionales coordinan durante el día. Y por la noche tienen lugar las proyecciones al aire libre, bajo las estrellas, si el viento y los apagones no estropean la función.
El festival se implanta pues como un oasis cultural en medio del desierto, debido a la inexistencia de pantallas de cine: tan sólo existen contados televisores que deben ser cargados con baterías de paneles solares.
En programa de la 2 "VERSIÓN ESPAÑOLA" ha decidido sumarse a la causa emitiendo un documental sobre el mismo el Viernes 25 de Abril antes de la emisión del coloquio y la película de Ventura Pons "AMOR IDIOTA".